jueves, 28 de abril de 2011

¿Por qué?

Las personas, qué somos, qué hacemos aqui, y por qué.

Mucha gente se pregunta estas tres preguntas, y seguramente muchas más, las personas siempre queremos saber el por qué de todo, el por qué del amor, el por qué de la felicidad, el por qué de la vida, el por qué de los sueños, y para que, ¿Para qué queremos saber el por qué de todo eso?.

¿Quizás para inventarlo?, ¿Para venderlo como si fuera un producto?.

Hay cosas en la vida que no se pueden saber, muchos porqués y pocas respuestas. Pero si en tantos años nadie ha encontrado la respuesta, seguramente será porque no la hay, y esa es una gran respuesta a todos los porqués...

Porque la vida en si es un por qué, y si queremos saber por qué, no hace falta descubrir nada, sólo hay que dejarse llevar y sentirlo, y entonces sabremos el por qué del amor, el por qué de la felicidad, el por qué de la vida, el por qué de los sueños, y eso, simplemente está en nuestro interior.

miércoles, 27 de abril de 2011

Agárrate

Y cojía su mano y no la soltaba, y peleaba para que no se soltase nunca, y se veía como con fuerza iba lentamente soltandose, no quería, pero iba soltandose.

Cosas que pasan-pensó.

No se daba cuenta que a veces soltarse no es malo, porque iba a estar siempre agarrada a algo, igual no le merecía la pena. Vale, se sentía más segura, pero eso que importa, en este mundo hay poca seguridad, y no el que está siempre agarrado a algo tiene más, a mi forma de ver tiene menos, porque no tiene libertad para buscar lo realmente seguro.

domingo, 17 de abril de 2011

En el jardín

La dulce brisa les pisaba los talones, las contraventanas rugían, chocaban y se destrozaban contra una pared qe ya debía tener unos cien años, esa casa estaba mal situada, siempre lo pensé, pegaba demasiado el viento, incluso cuando no hacía tanto, y cada vez que hacía viento, había que cambiar los cristales rotos de las ventanas...Eso no le gustaba mucho a las familias que vivían dentro de aquella casa, los niños lloraban, incluso los mayores pasaban miedo después de haber vivido tantos años en ese lugar. Siempre me pregunté, como podía vivir tanta gente en aquella casa, y a la vez, estar tan unidos, era algo inverosímil, se apoyaban, jugaban, reían, disfrutaban, realmente, se les notaba felices y, los más mayores se sentían como niños pequeños, en aquella casa donde habían pasado toda su vida, y donde la iban a pasar los niños pequeños que ahora había..

La noche entraba lenta, disimuladamente iba apareciendo la gran luna que, afortunadamente, les iba a iluminar la velada nocturna que allí habían preparado. Había muchas mesas, pero sobre todo, muchas sillas y sillones, algo fuera de lo normal, porque los niños solían jugar por el jardín y no se sentaban en toda la noche, eran felices con un balón y unos guantes de guardameta, con los que durante toda la noche se imaginaban como, algún día, cuando saliesen de aquella casa, podrían jugar con otros niños y llegar a lo más alto.

Lo de llegar a lo más alto no estaba claro, lo que si estaba claro, era que pronto se marcharían de aquella casa, más pronto de lo que cualquiera hubiese imaginado...

Las sillas no eran para ellos, las sillas eran para aquellos que estaban interesados en pagar una suma inmensa de dinero para apoderarse de aquella casa, que tantas alegrías les había dado. Todas esas familias estaban faltas de dinero, dificilmente llegaban a comer todos los últimos días del mes, y pasaban bastante frío, sobre todo en noches de invierno, y con mucho, mucho viento.

Aquellos señores, que venían muy elegantes, tomaron asiento, se les ofreció algo de beber, y no dudaron en aceptarlo. Ofrecían una cantidad demasiado jugosa como para ser rechazada por alguien que realmente en estos últimos meses conocía lo que era realmente el hambre. Aceptaron sin dudarlo ni un solo momento, aún sabiendo que se iban a arrepentir.

Los años siguientes fueron muy malos, los niños crecieron, ya sin aquella casa, sin aquel viento, y sin aquellos partidos en el jardín. Los más ancianos fueron muriendo poco a poco, lentamente, uno tras otro, dejando escritos muchos de ellos de lo que había sido su vida por aquella casa, la vida entera habían dejado en esas cuatro paredes y ese jardín...

Los niños, ya no tan niños, volvían de vez en cuando, para por lo menos, aunque fuese solo verla, desde fuera de la gran valla por supuesto, para por lo menos volver a ver aquella gran construcción.

Muchos años de arrepentimiento, mucho sufrimiento, pero...¿De verdad no merece la pena luchar por algo que deseas? ¿No merece la pena luchar por algo que quieres?.

Ellos se llevan planteando esta pregunta, desde aquel día que había tantas sillas en el jardín, cincuenta años atrás...

miércoles, 13 de abril de 2011

Infinito

Noche fría,húmeda,de las que se clavan en la piel y tiran, poniéndola de gallina. Abrazos por la calle, el frío se compensa, la noche se hace corta. Las farolas centellean al mismo ritmo al que caminan, derecha o izquierda, dificil decisión, pero van juntos, eso es lo importante. Se agarran de la mano y dejan atrás todo su pasado para ponerse rumbo hacia lo que iba a ser una gran decisión,la más importante de sus vidas. Siguen caminando, el rumbo no importa, la luna se empieza a esconder, y sale el reluciente sol de la mañana, y a sus espaldas, con el primer rayo de sol de la mañana se puede leer un cartel señalando hacia el rumbo que tomaron, en él se leía: "Infinito".


martes, 12 de abril de 2011

La vida

La vida son dos cosas, aprender y cuando ya hayas aprendido, enseñar. ¿Fácil no?, eso parece, pero desde que los hombres existen, nadie ha conseguido aprenderlo todo, ni conseguir enseñando que alguien lo aprenda todo. Parece tontería, pero está ahí, para que alguien lo intente, y el día menos esperado, llegará alguien y lo conseguirá, pero esa persona, no seremos ni tu ni yo, nosotros ya hemos perdido mucho tiempo en tonterías...



 

lunes, 11 de abril de 2011

A la vuelta de las rocas

Este es de los lugares que envuelve, y cuando te quieres dar cuenta te habías olvidado de donde estabas, y por qué estabas allí. Mucha gente conoce sitios como este, pero seguro que nadie conoce uno tan especial como este. Las olas rompen constantemente contra las rocas milenarias, llenas de rajas, y que parece que están a punto de caer, pero aguantan día a día. El sonido del mar, junto con su brisa olor a sal, las flores lo rodean todo y las grandes gaviotas que lo sobrevuelan con sus grandes alas blancas con puntas negras, todo perfecto.

Observo todo esto desde un sitio privilegiado, donde paso horas y horas y nunca me canso, donde viviría, donde pasaría todos los momentos posibles, si, ese sitio está aquí, a la vuelta de las rocas.


                                                                     

viernes, 8 de abril de 2011

Recoge que nos vamos

- Recoge que nos vamos,nos vamos muy lejos. A un lugar donde no haya guerras, donde si las hay, sean justificadas. Donde se respire aire limpio, donde no se mate por odio, ni por amor. Donde la vida sea mejor,donde disfrutemos día a día. Pero para ello tenemos que viajar muy lejos,un trayecto que nos llevará días,meses,años y no te puedo garantizar que lo consigamos. Si aceptas dame la mano y vayamos lejos. Si lo rechazas,te arrepentirás nada más que enciendas el televisor, escuches la radio, leas el periódico o salgas a la calle.

- Estás loco,no existe ningún lugar así.

-Si existiese, no te estaría pidiendo una vida conmigo para encontrarlo.